LAS CANDIDATURAS INDEPENDIENTES

Miguel Nava Xochitiotzi

Artículo publicado en la página 8 de El Sol de Tlaxcala el día 14 de septiembre de 2021

Una vez finalizado el proceso electoral en nuestro estado, resulta importante retomar temas trascendentales, relacionados con el desarrollo de este, con el objeto de poder evaluar los avances y retrocesos surgidos en el trayecto para consolidar la democracia en nuestro sistema electoral.

De esta forma las candidaturas independientes cobraron relevancia, pues como un hecho sin precedente y que caracterizó al pasado proceso electoral, es que se tuvo un alto porcentaje de participación de ciudadanos compitiendo por un cargo de elección popular a través de esta opción política, en virtud de lo anterior y a efecto de poder realizar un análisis puntual debemos señalar la evolución de esta institución en el sistema electoral.

Inicialmente se debe precisar que la figura de candidatura independiente surge en la reforma política previa de 2009, en las que se introducen diversos instrumentos de participación ciudadana como lo fue el referéndum, y el plebiscito, así ya en la reforma electoral de 2014, se reguló la forma y requisitos que debía seguir los aspirantes a obtener una candidatura por esta vía.

De igual manera la reforma electoral de 2015 fue diseñada con el fin de dificultar el uso de esta institución política pues determinó que un ciudadano que aspire a tener la calidad de candidato independiente no debía tener antecedentes en la vida política partidista, mientras que los partidos políticos podían postular candidatos sin que estos sean militantes de los referidos institutos.

De esta manera las candidaturas independientes, como una institución política moderna representan un eje rector en el proceso de democratización de nuestro sistema electoral pues permiten reflejar intereses ciudadanos no representados por los partidos políticos generando así pluralidad y participación ciudadana.

A su vez, permite transformar el paradigma democrático mexicano, pues  garantiza una mayor participación ciudadana, como se ha mencionado en líneas anteriores, así mismo proporciona una progresiva adecuación del funcionamiento de las instituciones, políticas y electorales, rompe  con la apatía y desconfianza ciudadana, ya que ofrece las  herramientas necesarias para evaluar y mejorar la gestión de los asuntos públicos, así como también que la política se socialice para reforzar las decisiones adoptadas, pues es un mecanismo que crea condiciones para una verdadera participación donde los ciudadanos se involucren en la vida pública.

Cabe destacar que en el pasado proceso electoral en Tlaxcala a pesar de que se tuvo una amplia participación de candidatos independientes compitiendo por diversos cargos de elección popular, el número de triunfos obtenidos no fue significativo pues de los sesenta municipios que renovaron la integración de sus Ayuntamientos solo en uno (San José Teacalco), el candidato independiente postulado logró el triunfo.

Sin embargo, debe resaltarse que el sistema electoral mexicano se encuentra en una etapa de consolidación democrática en el que se busca garantizar la mayor participación ciudadana y que el sistema adquiera mayor credibilidad ante la ciudadanía, buscando siempre el cumplimiento del constitucional de que todo ciudadano ejerza su derecho a votar y ser votado.